Páginas: Novena Inmaculada Concepción

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MAYO MES DE MARÍA

sábado, 27 de abril de 2019

ORACIÓN PARA OBTENER LA GRACIA DE TODAS LAS MISAS EN EL MUNDO


Oración para Obtener la Gracia de todas las Misas en el mundo

 Misa Padre Pío

Oración
  Padre Eterno, humildemente te ofrecemos nuestra pobre presencia, y la de toda la Humanidad, desde el principio hasta el fin del mundo. Deseamos asistir a TODAS las Misas que ya se han celebrado en el mundo, y a todas las que se celebrarán en el futuro. Te ofrecemos todas las penas, los sufrimientos, oraciones, alegrías y horas de reposo en nuestra vida. Ofrecemos todo en unión con estas mismas acciones de nuestro dulce Jesús, durante su estancia aquí en la tierra. Esperamos que toda la preciosísima Sangre de Cristo, todas Sus Llagas, y toda Su agonía nos salven. Te ofrecemos esta petición por medio del Doloroso e Inmaculado Corazón de María. Amén.

Querida Santa Filomena, rogad por nosotros. Obtened por nosotros gran pureza de mente y de corazón. Esta pureza nos conducirá al perfecto Amor de Dios.

Hay que buscar a Dios constantemente; y cuanto más se le busca, tanto más se le encuentra. El que a Dios busca, siempre lo encuentra.


Gracias Obtenidas Por Asistir A La Santa Misa

La Misa es la continuación del Calvario.

- Cada Misa vale tanto como la vida, sufrimientos y muerte de Nuestro Señor Jesucristo, ofrecidos en sacrificio.

- La Santa Misa es el acto de desagravio más poderoso para expiar los pecados.

- A la hora de la muerte, el consuelo más grande del alma consistirá de las Misas oídas en vida.

- Cada Misa bien oída nos acompañará hasta el Tribunal Divino, suplicando perdón.

- En la Santa Misa, según el fervor con que se asiste, se puede disminuir en grado mayor o menor, la pena temporal debida por los pecados.

- Al asistir devotamente a la Santa Misa, se rinde el más grande homenaje a la Sagrada Humanidad de Nuestro Señor.

- En la Santa Misa, Nuestro Señor Jesucristo ofrece expiación y desagravio por muchas omisiones y negligencias nuestras.

- En la Santa Misa, Jesucristo perdona los pecados veniales que todavía no se han confesado. Además se disminuye el poder de Satanás sobre el alma.

- Al asistir a la Santa Misa se proporciona a las ánimas del Purgatorio, el alivio más grande que sea posible.

- Una Misa bien oída durante la vida, será de más provecho al alma, que muchas que se ofrecieran para su reposo después de la muerte.

- Por asistir a Misa, el alma se preserva de peligros, desgracias y de calamidades, que de otro modo hubieran sucedido. Además, se abrevia o reduce la duración de su Purgatorio.

- Cada Misa bien oída obtiene para el alma un grado más elevado de gloria en el Cielo.

- En la Misa se recibe la bendición del sacerdote que Nuestro Señor ratifica en el Cielo.

- En la Misa se arrodilla entre una multitud de los santos ángeles, que están presentes en actitud de profunda reverencia, durante el sacrificio adorable de la Santa Eucaristía.

- En la Santa Misa se reciben bendiciones para todos los bienes y empresas temporales.

- En la Eternidad, realizaremos plenamente el gran valor de haber asistido a la Santa Misa diariamente.

Rezar por los sacerdotes para que obtengan la gracia de ofrecer la Santa Misa con santo amor y reverencia"

- San Buenaventura ha dicho: "El que menosprecia a la Santísima Virgen, morirá en sus pecados y será condenado."

LA SANTA COMUNIÓN
Cada vez que recibimos la Santa Comunión, se nos perdonan los pecados veniales.
A Santa Gertrudis, Jesucristo ha revelado: "Cada vez que un alma recibe la Santa Comunión, algo hermoso sucede a cada alma en el Cielo, en la Tierra, y en el Purgatorio."

El Cura de Ars decía: "Una sola Comunión bien recibida vale más que una inmensa suma de dinero que se distribuyera a los pobres.

Cada vez que recibimos la Santa Comunión, nuestro lugar en el Cielo es elevado para siempre, y se abrevia nuestra estancia en el Purgatorio.

La Comunión Espiritual
Es enorme el valor de una comunión espiritual bien hecha. Podemos y debemos hacer la comunión espiritual frecuentemente. Es muy sencillo este acto. Se efectúa simplemente pensando en Jesús, en Su gran Amor a nosotros, y en nuestro Amor hacia Él. Luego, pedir a la Santísima Virgen que implore a su Divino Hijo venir a nuestros corazones. Estas comuniones espirituales se pueden ofrecer por los intereses de Doloroso e Inmaculado Corazón de María. ¡También se añade la intención especial nuestra!

Nuestro Señor nos ha dicho que después de recibir la Santa Comunión, debemos repetir la siguiente jaculatoria: "Sacratísimo Corazón de Jesús, ¡que todo el mundo Os ame con ardiente Amor!" (Revelación de N.S. a Gabrielle Bossis en Francia).



domingo, 14 de abril de 2019

EL AVE MARÍA DE ORO



EL AVEMARÍA DE ORO


 Promesas:

“A las almas que en vida Me hayan saludado con esta Oración, Me apareceré con gran resplandor en la hora de la muerte. Además, cuando el alma se separe del cuerpo, Me manifestaré con hermosura tan espléndida, que el alma sentirá un gran consuelo. En ese instante, experimentará algo semejante a las delicias del Paraíso.”

(Palabras de la Santísima Virgen a Santa Gertrudis)


¡Ave, María!

¡Blanco Lirio de la Gloriosa
y siempre Serena Trinidad!
¡Salve, Brillante Rosa del Jardín
de los Deleites Celestiales!
¡Oh, Tú, de Quien Dios quiso nacer en este mundo,
y de cuya Leche el Rey del Cielo quiso ser nutrido!

Alimenta nuestras almas con las efusiones
de la Gracia Divina.
Amén.

sábado, 13 de abril de 2019

ROSARIO DE FATIMA, DEDICADO A LA SANTÍSIMA TRINIDAD



ROSARIO DEL CORAZÓN DE FÁTIMA
 DEDICADO A LA SANTÍSIMA TRINIDAD

ORACIONES INICIALES AL ROSARIO:

 Espíritu Santo ilumínanos: 
Yo, Padre Celestial e Hijo fundimos nuestros Corazones en gracias y orden en este Rosario, para Santificación de las almas y grandeza de la Santísima Trinidad y con el Espíritu Santo e ilumine y dirija el Rosario, para la Bella entre las bellas, María Inmaculada llena de gracia entre toda mujer. Amén.

Señal de la Cruz...

V: Abre, Señor, mis labios.
R: Y mi boca cantará tus alabanzas.

V: Ven, oh Dios, en mi ayuda.
R: Apresúrate, Señor, a socorrernos.

V: Gloria al Padre...


Acto de Contrición: 
 Señor mío, Jesucristo, Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío, por ser Vos quién sois y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa de todo corazón haberos ofendido; propongo firmemente nunca más pecar, apartarme de todas las ocasiones de ofenderos, confesarme y, cumplir la penitencia que me fuera impuesta. 

Ofrezco, Señor, mi vida, obras y trabajos, en satisfacción de todos mis pecados, y, así como lo suplico, así confío en vuestra bondad y misericordia infinita, que los perdonareis, por los méritos de vuestra preciosísima sangre, pasión y muerte, y me daréis gracia para enmendarme, y perseverar en vuestro santo amor y servicio, hasta el fin de mi vida. Amén.


Ofrecimiento del Rosario:
Divino Jesús, te ofrecemos el Rosario que vamos a rezar para contemplar los misterios de nuestra Redención. Concédenos que, por la intercesión de María Vuestra Madre Santísima, a quien nos dirigimos, obtengamos las gracias para rezarlo bien y ganar las indulgencias de esta Santa devoción. Así sea. Amén.


T = Virgen Santísima blanco Lirio de la Trinidad, Fúlgida Rosa del Paraíso, os saludamos, os amamos y nos consagramos a Vos. Soberano Santuario, Madre del Divino Verbo, libra Virgen del Infierno al que reza tú Santo Rosario. Y manda al Ángel del Rosario y a San Sebastián para que lo recemos bien y nos ayuden en las comunicaciones. Y el Espíritu nos ilumine que así sea. Amén.


Ofrecimiento:
Te pedimos por la conversión de los pecadores, las almas del Purgatorio, las pérdidas y las que nadie se acuerda, por los difuntos, agonizantes y moribundos y por la salvación del mundo entero.

Por la Iglesia, el Papa, monjitas y todo el Clero. Por los tibios, indiferentes, apóstatas, modernistas, el retorno de tus hijos perdidos. 

Por el sacrilegio que se cometen dentro y fuera de las Iglesias y en las casas, para que Dios perdone aquellos hermanos que indignamente tocan el Cuerpo de Jesús sin ser consagrados. 

Por todos los enfermos y los más necesitados, la droga, el dolor y el sufrimiento, por los mendigos y por los que pasan hambre, frío y sed de justicia. 

Por las guerras, catástrofes, violencia, atentados, terrorismo del mundo entero. 

Por los abortos, eutanasia, los divorcios, por los médicos, políticos y científicos. 

Por las familias que haya unión y amor compartido... por los hijos, para que vean el sacrificio de los padres y vayan por buen camino, por la juventud y ancianos. 

Por las almas que Jesús y María pierden a diario, para que la luz penetre en los hermanos que están ciegos, ignoran, olvidan o no conocen a Dios. 

Por sus amigos y  enemigos y todas las bofetadas y ofensas que damos a diario a Jesús y María. 

Por los grupos verdaderos de oración y los hermanos que se dan así mismo en caridad o apostolado de Dios... Altísimo Dios, bendice a nuestros amigos y enemigos.

Para que en los Eventos se acorten los días de sufrimiento... Y para que Reinen Jesús y Triunfe el Inmaculado Corazón de María. 

Para que volvamos a creer en Dios y rezar el Santo Rosario, por los presentes y ausentes, sus familias, sus problemas y las intenciones que se nos olvida; roguemos al Corazón de la Santísima Trinidad y al de María Santísima que así sea. Amén.


Aquí se reza el rosario tradicional con los misterios que correspondan al día.

MISTERIOS MEDITADOS DEL SANTO ROSARIO:

Después de cada misterio:
V = Ave María Purísima
R = Sin pecado original concebida y siempre virgen, hija de San Joaquín y Santa Ana, es, María Santísima. Amén.
- María madre de gracia, Madre de piedad, amor, bondad, y misericordia, defiéndenos del enemigo malo y ampáranos ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
- Oh Jesús mío, perdona nuestros pecados, líbranos del fuego del infierno, llevad todas las almas al cielo especialmente las más necesitadas de tu misericordia Divina.
- Oh Dios mío, yo creo y espero en Vos, os adoro y os amo y os pido perdón por los que no creen, ni te adoran, ni te esperan, ni te aman.

ORACIONES FINALES DEL ROSARIO:
Al final del quinto misterio:
1) Dios te salve María, Hija de Dios Padre, Purísima y Castísima antes del Parto, Coronada con el Poder del Padre Celestial ----- Virgen fuiste antes del Parto y al mirarte Dios-Trino quedó maravillado, alcánzanos María por tu limpieza la virtud admirable de la pureza:  Ave María....

2) Dios te salve María, Madre de Dios Hijo, Purísima y Castísima durante el Parto, Coronada con la Sabiduría del Hijo ----- En el Parto Divino Sagrada Reina, fuisteis más pura y cándida que las azucenas, purifica Señora nuestras acciones, pensamientos, palabras y corazones:  Ave María....

3) Dios te salve María, Esposa fidelísima de Dios Espíritu Santo, Purísima y Castísima Después del Parto, coronada con el Amor del Espíritu Santo ----- Sois Lirios de pureza después del Parto y en tu linda belleza del Cielo encanto, has que consigamos sean nuestros afectos puros y castos: Ave María....

- Dios te salve María, Templo y Sagrario de la Santísima Trinidad, concebida sin Mancha de pecado original desde el primer instante de su ser natural: Gloría al Padre y ..........




Un Credo a Jesús Sacramentado:

Creo en Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo su único Hijo Nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo. Nació de Santa María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios Padre, todopoderoso. Desde allí va a venir a juzgar a vivos y muertos. Creo en el Espíritu Santo, la Santa Iglesia católica la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén.

 (Con la cabeza inclinada o en tierra):
 “Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo, yo te adoro profundamente y te ofrezco el preciosísimo Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de Nuestro Señor Jesucristo, presente en todos los Sagrarios del mundo, en reparación por los ultrajes, sacrilegios e indiferencias con que Él mismo es ofendido, y por los infinitos méritos de su Sacratísimo Corazón y el Inmaculado Corazón de María, te pido la conversión de todos los pobres pecadores”. Amén.


 Agradecimiento:
 Infinitas gracias te damos Soberana Princesa, por los beneficios que todos los días recibimos por vuestras liberales manos, dígnate ahora y siempre, tomarnos bajo tu poderoso amparo, y para más obligarte, te saludamos diciendo una Salve
Dios te salve, Reina y Madre de misericordia, vida, dulzura y esperanza nuestra. Dios te salve. 
A Tí clamamos los desterrados hijos de Eva, a Tí suspiramos, gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. Ea, pues, Señora Abogada Nuestra, vuelve a nosotros tus ojos misericordiosos, y después de este destierro, muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre. Oh, clemente, oh piadosa, oh dulce Virgen María. 
Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios,  para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo. Amén.


- Acordaos,
¡Oh piadosísima Virgen María!, qué jamás se oyó decir que ninguno de los que han acudido a vuestra protección, implorando vuestra asistencia y reclamando vuestro socorro haya sido abandonado de Vos. Animado con esta confianza a Vos también acudo, ¡oh Madre, Virgen de las vírgenes! Y aunque gimiendo bajo el peso de mis pecados, me atrevo a comparecer ante vuestra presencia Soberana. No desechéis, ¡oh Madre de Dios! Mis humildes súplicas, ante bien inclinad a ellas vuestros oídos y dignaos atenderlas favorablemente. Amén.

- ¡Corazón Inmaculado de María! que, a cambio de tu amor para con nosotros, recibes tantas ofensas: Yo te ofrezco y consagro perpetuamente todo mi ser, para corresponder de la mejor manera, a tu ternura maternal, para reparar las injurias de que eres objeto de parte de tantos hijos ingratos, y para vivir por mi parte la consagración del mundo entero, tan deseado por tú Corazón y llevada a cabo por el Sumo Pontífice. Dígnate aceptad este humilde pero sincero ofrecimiento, mi alma, mi cuerpo, mi vida son tuyos. Y pues enteramente te pertenezco, guárdame y defiéndeme como cosa enteramente tuya. Amén. 
 Padre Nuestro...

- Un Padre nuestro por todos los Santos, Ángeles, Arcángeles, Mártires y guías de la Corte Celestial que intercedan por todos nosotros: 

- Un Padre nuestro por la conversión de los pecadores: 

- Un Padre nuestro por las almas del purgatorio y las almas perdidas: 

- Eres del Carmelo la Pastora amable que a tus ovejuelas das pastos suaves. A Ti clamamos buscando piedades, ea pues Señora no nos desampares. Y si al Purgatorio bajan tus cofrades, pedimos Señora que al punto los saques.
(3 veces se repite).

Un Credo al Sagrado Corazón de Jesús por la violencia del mundo entero: 
Creo en Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo su único Hijo Nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo. Nació de Santa María Virgen, 

padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos,

subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios Padre, Todopoderoso. Desde allí va a venir a juzgar a vivos y muertos. Creo en el Espíritu Santo, la Santa Iglesia católica la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén

Una Salve al Corazón de María por su país (nombre el país):

Dios te salve, Reina y Madre de misericordia, vida, dulzura y esperanza nuestra. Dios te salve. A Tí clamamos los desterrados hijos de Eva, a Tí suspiramos, gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. Ea, pues, Señora Abogada Nuestra, vuelve a nosotros tus ojos misericordiosos, y después de este destierro, muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre. Oh, clemente, oh piadosa, oh dulce Virgen María. 
Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios,  para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo. Amén.



- Una Salve por los gobernantes: 

- 3 Avemarías por la intenciones del Santo Padre, para que la Madre lo proteja de todo: 

- Un Padrenuestro a San José: para que nos ayude en la vida y en la hora de nuestra muerte: 

- Para las conversiones y consagraciones: Padre nuestro, Avemaría y Gloria...

- Un Ave María a Nuestra Señora del Aviso: Para que nos avise de todo: 
 Oh Señora del Aviso, avísame de todo, especialmente antes de mi muerte, dame dolor de mis pecados, Ven a mí y sálvame. Avemaría...
(Cuando se rece el rosario tradicional, decir siempre esta oración a Nuestra Señora del Aviso)

- Oración para el terrorismo del mundo entero.
1) Ciégate Satanás, que el terrorismo no mate más.
“María, Madre mía; Líbranos de caer en pecado mortal y por tu Poder de Reina, líbranos del espíritu maligno de Satanás”. Ave María.....

2) Ciégate Satanás, que el terrorismo no mate más.
“María, Madre mía; Líbranos de caer en pecado mortal y por tu Divina Misericordia, líbranos del Espíritu maligno de Satanás”. Ave María....

3) Ciégate Satanás, que el terrorismo no mate más.
“María, Madre mía; Líbranos de caer en pecado mortal y por tu Amor de Madre, líbranos del espíritu maligno de Satanás”.  Ave María y un Gloria...

- Después haciendo la señal de la Cruz se dice:
+ En el nombre del Padre, ciégate Satanás que el terrorismo no mate más.
+ En el Nombre del Hijo, ciégate Satanás que el terrorismo no mate más.
+ En el nombre del Espíritu Santo, ciégate Satanás que el terrorismo no mate más. Amén.
“¡Madre de Dios, del Amor, del dolor y de Misericordia, rogad por todos nosotros y por el mundo entero!” Amén.

- Un Padrenuestro al Ángel Custodio por nuestro país (nombre el país): Padrenuestro...
Oración: Ángel de nuestro país, tan olvidado y ultrajado, a ti acudimos en estas horas cruciales. Bendice a Nuestra Nación e implora a Dios para que nos guarde de tanto castigo y de las guerras. Por tu intercesión pedimos perdón al Padre Eterno, y ayuda para que nuestro país vuelva a ser Mariano y que nos de la Paz de Dios. Amén.

- Un Padrenuestro al Apóstol Santiago:                 
Oración: 
Glorioso Apóstol, ilustre abogado de los cristianos, en esta hora crucial en que vivimos, necesitamos la mano amorosa de nuestro fundador. No desoigas nuestras súplicas e inclinad la cabeza hacia Nuestra Señora, para que ponga paz en nuestro país y la dicha del amor en todos. Amén.

- Un Padrenuestro a Santa Teresa de Jesús:  
Oración: Teresa de Jesús, Paloma del Señor. Tú que invocabas al Espíritu Santo, invócale para que ayude a nuestro país. Que sus Lenguas de Fuego, iluminen nuestros corazones para alabar solo a Dios como tú. Tú que fuiste tan querida por Jesús, y ahora estás gozando del Cielo, acuérdate de nuestro país e implora a Dios por todos nosotros. Amén.

- Un Padrenuestro al Arcángel San Miguel:   
Oración: San Miguel Arcángel, defiéndenos en la pelea contra Satanás y sus demonios, sed nuestro amparo y protección, que el Altísimo os dé el poder y el permiso para que nos asistáis y que Dios haga oír su voz imperiosa para que expulse a Satanás y sus demonios que quieren hacer perder a la humanidad. Que tu grito: "Quién como Dios", someta a Satanás y sus demonios bajo nuestros pies. Amén.

- Un padrenuestro a San Juan Bosco:  
Bendición de San Juan Bosco para la juventud, los niños y ancianos del mundo entero:  Dios te bendiga con el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Y que María vuestra Mamá del Cielo, María Auxiliadora os ilumine y os coja bajo el Manto y os lleve al Cielo amén.

- Un Padrenuestro a San Miguel Arcángel:   



- Por el Papa y para ganar las indulgencias del Santo Rosario: Padrenuestro. Avemaría. Y Gloria…

- Oración a la Madre de Dios:
La Reina del Cielo está siempre en la presencia del trono del Altísimo. La grandeza de Su Nombre no es menor que la altura del cielo sobre la tierra, Su Nombre, envuelto en un manto de luz. Que el mundo entero doble su rodilla ante Ella que lleva el Nombre Sagrado: Madre de Dios. Amén.

- Santo, Santo, Santo es el Señor Dios del Universo llenos están el Cielo y la Tierra de vuestra Gloria. Gloria al Padre, Gloria al Hijo, Gloria al Espíritu Santo.

- Santo Dios, Santo fuerte, Santo Inmortal, líbranos Señor de todo mal y de las asechanzas de Satanás. (3 veces).

- Sea por siempre Bendito y Alabado, sea, el Santísimo Sacramento del Altar y la Gran Reina de los Ángeles, María Santísima, concebida sin mancha de pecado original desde el primer instante de su ser natural. Amén.


- El Ángelus

V. El Ángel del Señor anuncio a María,
R. Y concibió por obra y gracia del Espíritu Santo.
      Dios te salve María... 

V. He aquí la esclava del Señor,
R. Hágase en mí según tú palabra.
     Dios te salve María... 

V. Y el Verbo de Dios se hizo carne,
R. y habitó entre todos nosotros.
     Dios te salve María...

V. Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios,
R. para que seamos dignos de alcanzar y gozar las Promesas de Nuestro Señor Jesucristo. Amén.

Oremos:
Te suplicamos, Señor, que derrames tus gracias sobre nuestras almas, para que habiendo conocido por el anuncio del Ángel la encarnación de tú Hijo Jesucristo, por los méritos de su Pasión y Cruz seamos llevados a la Gloria de la Resurrección, por El mismo Jesucristo Nuestro Señor, que así sea. Amén.

Gloria al Padre... (2 veces). Gloria sea al Padre Eterno, gloria al Hijo  Soberano, por los siglos de los siglos, gloria, al Espíritu Santo.

V. Ave María Purísima; 
R. Sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a Vos. (3 veces)
 Bendícenos tierna Madre, desde el Trono de tu amor, Bendícenos Madre mía y échanos tu bendición.

- Bendita sea tu pureza Y eternamente lo sea, Pues todo un Dios se recrea En tan graciosa belleza. A ti, celestial Princesa, Sagrada Virgen María, Yo te ofrezco en este día Alma, vida y corazón; Mírame con compasión, No me dejes, Madre mía. Amén.

- Oración para la Victoria final:
María Santísima y San Miguel Arcángel blandiendo las banderas de los Sagrados Corazones, nos alzamos en guerra contra el enemigo de Dios. ¡Temblad Satanás! Pues ya llegó tu hora; venceremos nosotros todos los cristianos, amigos y compañeros de Jesús de Nazaret. 
 Déjate de abusar y dañar, pues estamos todos dispuestos con el Ejército Celestial, a darte caza para que reine Jesús y María. No te escucharemos, no maldeciremos, no nos mancharemos las manos; sólo la lucha será contigo y todos tus esbirros. ¡Brava será nuestra lucha! Más, vencerá Dios y todo el Ejército    Celestial con nuestra pobre ayuda.
Viva Dios Padre, Viva Jesús, Viva el Espíritu Santo y Viva María. Venció el Amor.

Aleluya! Aleluya! Aleluya! Amén.

- Oración para bautizar a los niños muertos y no nacidos hoy, y si Dios nos lo permite, bautizar a los que están en el Limbo.
Por la Misericordia de Jesús, por el Divino Corazón del Maestro, por la Sangre y el Agua “esos dos Rayos Divinos del Corazón de Jesús” que los niños no bautizados hoy, los niños muertos y no nacidos hoy y los del Limbo con nuestro sacrificio, sean bautizados en vuestra Sangre y en vuestra Agua y tened Misericordia de todos ellos y ponerles los nombres..., y que su Madrina de Honor, María Santísima, les ponga los nombres… y les lleve el agua a sus cabecitas y la sal a sus boquitas. Amén.
Y se echa agua bendita haciendo la señal de la Cruz. (3 veces)

- Oración para las almas del Purgatorio, las almas perdidas y por las que nadie se acuerda.
 Hijas mías queridas, que por la misericordia de Dios estáis lavando vuestras vestiduras y a quien Dios Padre os ama por encima de todo, de vuestros pecados, vanidades, orgullo y errores… Pedimos humildemente que se haga justicia y que mi Padre no vea sus pecados sino el amor que ponen los hijos tuyos, hermanos de ellas en ayudarlas y calmarlas. 
 Qué con tu infinita Misericordia acortes sus sufrimientos y agonías para así poder contemplar tu belleza y grandezas antes y cuanto antes te puedan alabar. Acuérdate Padre del dolor tan inmenso que tienen y aunque justo es el castigo por sus ofensas a Dios o a sus hermanos, también es verdad que eres poderoso y puedes inmediatamente sacarlas y llevarlas a la Gloria.
 Jamás Dios guardo rencor solo sabe hacer justicia, pues en tu Justicia míranos con amor para esas pobres almas que lloran de pena ¿Sí Padre mío…? Qué Dios de los Cielos que siembra Amor, podamos pronto recoger esa semilla para el Cielo, por Cristo Jesús, que así sea. Amén.

- A la Madre de Dios: 
Eres la Pastora amable que a tus ovejuelas das pastos suaves. A Ti clamamos buscando piedades, Ea pues Señora no las desampares. Y si al Purgatorio bajan tus cofrades: Pedimos Señora, que al punto los saques. (3 veces) Padrenuestro, Avemaría y Gloria… 

 Oración final:
- Hoy de Ti nos despedimos Madre y a descansar nos iremos, defiéndenos esta noche y toda la semana pues el próximo día si Dios quiere volveremos.

V. Ave María Purísima.
R. Rogad por nosotros que recurrimos a Vos. Amén.

 Letanías Reparadoras al 
Inmaculado Corazón de María

- ¡Oh Madre nuestra dulcísima! Permite por piedad que nosotros tus devotos hijos, unidos en un solo pensamiento de veneración y amor, vengamos a reparar las horrendas ofensas que cometen contra Ti tantos desventurados que no conocen el paraíso de bondad y de misericordia de tu corazón maternal.

- De la horribles ofensas que se cometen contra tu dulcísimo Jesús, te consolaremos oh María.

- De la espada de dolor que hijos degenerados quieren nuevamente clavar en tu corazón maternal, te consolaremos oh María.

- De las blasfemias nefandas que se vomitan contra tu purísimo y santísimo nombre, te consolaremos oh María.

- De las infames negaciones que se hacen de tus privilegios y de tus glorias más excelsas, te consolaremos oh María.

- De los insultos que los protestantes y otros herejes lanzan contra tu culto dulcísimo, te consolaremos oh María.

- De las sacrílegas afrentas que los impíos cometen contra tus carísimas imágenes, te consolaremos oh María.

- De las profanaciones que se cometen en tus santuarios, te consolaremos oh María.

- De las ofensas contra la virtud angelical que en Ti se personifica, te consolaremos oh María.

- De los ultrajes que se cometen con las modas perversas, contra la dignidad de la mujer, por Ti reivindicada y santificada, te consolaremos oh María.

- De los horrendos delitos con que se aparta a los inocentes de tu seno maternal, te consolaremos oh María.

- De las incomprensiones de tus derechos divinamente maternales, por parte de tantas madres, te consolaremos oh María.

- De las ingratitudes de tantos hijos a tus gracias bellas, te consolaremos oh María.

- De la frialdad de tantos corazones frente a tus ternuras maternales, te consolaremos oh María.

- Del desprecio de tus invitaciones de amor, te consolaremos oh María.

- De la cruel indiferencia de tantos corazones, te consolaremos oh María.

- De tus lágrimas maternales, te consolaremos oh María.

- De las angustias de tu dulcísimo corazón, te consolaremos oh María.

- De las agonías de tu alma santísima en tantos Calvarios, te consolaremos oh María.

- De tus suspiros de amor, te consolaremos oh María.

- Del martirio que te ocasiona la pérdida de tantas almas redimidas por la sangre de tu Jesús y por tus lágrimas, te consolaremos oh María.

- De los horrendos atentados que se cometen contra tu Jesús, que vive en su Vicario y en sus sacerdotes, te consolaremos oh María.

- De la conjuración infernal contra la vida de tu Jesús en su Iglesia, te consolaremos oh María. 

- ¡Oh Madre santa dulcísima, que en el heroísmo de tu amor maternal, al pie de la cruz, rogaste por aquellos crueles que martirizaban tan atrozmente a tu amado Hijo Jesús y desgarraban tu Corazón ternísimo! Ten piedad de todos los desventurados e indignos que te ofenden; haz que ellos también puedan ser acogidos en tu seno maternal, purificados por tus lágrimas benditas, y admitidos a gozar los frutos estupendos de tu maternal misericordia. Amén.

R. Santa María, líbranos de las penas del infierno.